Esta semana hemos tenido una visita muy querida. Antonio, el orientador del Centro, se ha pasado por nuestra clase para recordar a los alumnos de 6º que a la vuelta de las vacaciones empezaremos a abordar el tema del instituto.
Como no podía ser de otro modo, le hemos enseñado nuestras "Harrypottadas" de clase y se ha interesado por todo. Incluso... por las famosas grajeas, que... ¡pobre inocente! se ha ofrecido a probar, tras la insistencia de mis "pequeños diablillos"
Tomó una grajea y.... ¡Oh Dios mío! ¡Le fue a tocar una buena! (mira que es difícil)
Pero claro... la curiosidad de experimentar otros sabores como... hierba, comida de perro, pañal de bebé o incluso vómito, era muy grande así que ni corto ni perezoso.... ¡se lanzó a por la segunda! y.... ¡sorpresa!... ¡está vez sí sabia a rayos!
Fue muy divertido ver su reacción aunque dudo mucho que se le ocurra volver a comer otra.
Toda la clase se desternillaba de la risa con sus caras y aquí os dejo una muestra.
Antonio elige una grajea |
La empieza a saborear... |
y decepción general. ¡Está buena! |
Luego toma la segunda y... |
¡Hasta aquí hemos llegado! |
¡Antonio! ¡Muchas gracias por ser así!
¡Tan atrevido y cariñoso con todos!
Cuando tengas hambre... ya sabes donde hay "caramelillos" ;)
No hay comentarios:
Publicar un comentario