Una de las cosas que más les llama la atención a los niños cuando entran en mi clase son los "Botes de la calma".
Y ¿por qué no hacer el suyo propio?....
Aunque son muchas las recetas que se pueden encontrar por Internet y hay un montón de tutoriales sobre el tema, nosotros hicimos la versión "unicornios" y cual cocineros frente a los fogones, nos pusimos ¡manos a la obra!
Éste fue nuestro proceso...
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1- Echamos agua en una botella pequeña |
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2- Añadimos gomina del pelo |
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3- Echamos purpurina |
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4- y más purpurina |
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5- Agitamos con fuerza |
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6- Limpiamos y recogemos |
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7- Y.... ¡listo! ¡Nuestra botella de la calma! |
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